El Protocolo de la Casa de S.M. El Rey


El viernes pasado día 13 de octubre, tuve el gran honor y la gran suerte de compartir cena con una serie de amigos entre los que destacaba  una de esas personas que no pasan inadvertidas y te dejan huella.

Si, además del Presidente de la Asociación Española de Protocolo, Juan Ángel Gato, y la incansable secretaria de la AEP, Catalina Barceló,  Javier Aguado, Jefe de protocolo de la Once, Alfonso Yagüe, jefe de protocolo del ayuntamiento de Yecla y otros contertulios,  me refiero al Excmo. Sr. D. Alfredo Martínez Serrano, Jefe de protocolo de la Casa de Su Majestad el Rey.

Desde que fuimos a recogerle a la estación de tren de Murcia, hasta  que terminamos la cena, así como las horas que compartimos al día siguiente en las Jornadas de Protocolo organizadas magistralmente por la delegada de  la Asociación Española de Protocolo en Murcia, Ana Maria Fernández, fueron unas horas absolutamente deliciosas en las que no solo aprendí  de un gran profesional sino que me empapé de lo que significa ser “buena gente” como decimos en mi tierra.

Quisiera rendir aquí un humilde homenaje a una persona que destila protocolo del de verdad por todos sus poros y del que, solo con estar a su lado, observando su actitud, y analizando  esa posición  humilde que toman las personas verdaderamente sabias, aprendes  lo que debe ser  el modelo de alguien que se dedica a esta apasionante profesión.

Martínez, es un hombre que vive el protocolo, que lo siente, consciente de la potencia que tiene como elemento comunicador y que, por tanto,  se apasiona con él  y que tiene la visión más actual  de las que he visto y  de lo que significa  esta palabra

Tuve la suerte de asistir a la conferencia MAGISTRAL  que dictó, al día siguiente, en el monasterio de los Jerónimos sede de la Universidad Católica de Murcia.

El tiempo justo, 35 minutos en los que todos los asistentes, con el aforo completo y en el que no se oía ni una mosca, asistimos encantados a cómo desgranó de manera sencilla y fácil, pero con todo el contenido, el porqué y el cómo del protocolo que lleva a cabo Su Majestad el Rey y su Casa.

Un ejemplo de modernidad, de adaptación y sobre todo, de tener las cosas claras para conseguir, a través del protocolo, “HACER PAÍS” como bien dijo en repetidas ocasiones.

Esto supone, desde la más alta instancia del protocolo del estado,  darle valor a esta profesión, en muchos casos denostada por una cierta ambigüedad de la expresión para los profanos, pero que hace que me sienta  muy retribuido en el  esfuerzo realizado durante más de 25 años en el  desarrollo del proceso de enseñanza-aprendizaje  del protocolo, que realizamos en la EIP, obteniendo como resultado el desarrollo profesional de este oficio apasionante que además ayuda a las personas a ser más personas.

El contenido de la conferencia, una auténtica maravilla que a ver si soy capaz de resumir:

Lo primero que acometió, para situarnos, es el entorno en el que se mueve el mundo del protocolo, aludiendo a que “no vivimos una época de cambios sino un cambio de época lo que obliga al necesario proceso de evolución del protocolo, como consecuencia de la internacionalización, la globalización, la revolución tecnológica,  y la realidad cada vez es más compleja.

En definitiva, al darse una modificación del contexto, la cuestión se debe centrar en  ¿cómo afecta  esta nueva realidad al profesional del protocolo?

1.- El protocolo como disciplina.

A nadie, y mira que llevo años en esto, a nadie le he escuchado explicar el concepto de protocolo como disciplina, de manera tan sencilla, clara y tan completa. Es el concepto que,  desde la Casa de  SM El Rey, se tiene del protocolo con el objetivo de hacer frente a los nuevos retos sociales.

Se basa ese concepto de protocolo en dos aspectos básicos:

La interdisciplinariedad: El profesional de protocolo debe tener en cuenta todo lo que le rodea para no alejarse de la realidad.

La Interconectividad: aludiendo al necesario trabajo en equipo y la horizontalidad para acometer los trabajos que se acometan.

Partiendo de estos dos puntos, resumió en cuatro puntos el concepto de protocolo que se aborda desde la Casa:

El protocolo como ORGANIZACIÓN

Fíjense con qué facilidad y sencillez se consigue el concepto más amplio y mejor que a lo largo de los años he escuchado sobre lo que es y significa el PROTOCOLO como disciplina.

Su frase es definitiva:

“El protocolo es un medio y no un fin en sí mismo en la tarea del profesional”

Ojalá se trasladase, ese concepto que se abraza desde la Casa Real, a todas las instituciones. Públicas y privadas. A todas.

A partir del concepto claro del protocolo como disciplina, acometió la manera en que se debe afrontar cualquier tipo de acto, y lo resumió en cuatro puntos concéntricos en los que incorporaba 4 preguntas clave:

¿Por qué-

Desgranó  las cuatro preguntas clave que debe hacer el organizador de cualquier tipo de acto, cuyas respuestas acertadas o no, consiguen el éxito o el  fracaso del mismo, proyectando claramente, aquello del objetivo del acto, el tipo de acto, los asistentes y  la forma en que se va a desarrollar.

En palabras de D. Alfredo,

el protocolo debe servir para conseguir el fin”.

“Profundizar y tener claro el PORQUÉ, es la clave del éxito”.

Buscando ese Porqué,  explicaba, que siempre está presente  el hecho de ser la JEFATURA DEL ESTADO, como la institución superior que garantiza  la estabilidad del país, sin olvidar el  otro punto básico de la unidad, la cohesión y la acción vertebradora que debe realizar la INSTITUCIÓN.

El tercer punto fundamental de ese PORQUÉ en todos los actos,  es la cualidad que tiene la Casa como ÓRGANO CONSTITUCIONAL, en el ejercicio de las funciones de la Casa real que se detallan en la constitución.

Y por último, algo que, desde mi humilde punto de vista, se palpa  en las apariciones públicas de los miembros de la Casa, es la RENOVADA MONARQUÍA desde el mismo momento de la Proclamación de Su Majestad por medio de la EJEMPLARIDAD, Y LA FUNCIONALIDAD, apoyadas  y sin olvidarse de su capacidad de SÍMBOLO HISTÓRICO DE IDENTIDAD que nos emociona a todos.

Teniendo como base este concepto y estas premisas básicas, se acomete todo el planteamiento protocolario de la Casa Real,  que se centra en ACTOS PROPIOS / ACTOS OFICIALES EXTERNOS/ AUDIENCIAS Y ENCUENTROS /VIAJES Y VISITAS INTERNACIONALES.

Nos indicó las pautas generales que se siguen en la organización de cada uno de ellos.

Y para poner la espléndida guinda al estupendo pastel, terminó regalándonos un decálogo  de  cuestiones que el profesional de protocolo no debe nunca olvidar y que no me resisto, POR SU IMPORTANCIA, a detallar:

CLARIDAD DE IDEAS: Conocimiento y gestión del presupuesto propio- Objetivos- etc.

FLEXIBILIDAD: Adaptación de las técnicas organizativas y metodológicas a ese porqué que regula todo el acto.

HUMANIDAD: Las personas están en el centro del protocolo y se debe tratar de eliminar tensiones por medio del: Conocimiento del acto/ educación y cortesía / la sonrisa amable.

SOLIDEZ Y RIGOR: Trabajo duro y no improvisación en la preparación y ejecución del acto

COHERENCIA Y CONSISTENCIA: Trabajar para la credibilidad por medio del criterio efectivo

CAPACIDAD E ADAPTACIÓN: Tener en cuenta las características de cada acto,  y adaptarse a ellas, con una actitud abierta

TRABAJO EN EQUIPO: No es posible hacer un acto de manera individual. Hay que desarrollar el trabajo en equipo en todo acto.

EL VALOR DE LA EXPERIENCIA: Cada acto es único, pero se asemejan. Hay que beber de la experiencia. El método de la evaluación es fundamental.

ADAPTACIÓN AL MEDIO: Saber y conocer el entorno en el que se ejecuta el acto. Aceptando sus singularidades

LA CREATIVIDAD: conseguir que el acto, aunque se repita, sea fresco y novedoso que permita una buena transmisión del mensaje.

Decálogo Alfredo Martínez

Me gustaría mucho poder transcribir de manera literal la conferencia entera pues, de verdad, cada palabra era importante, pero aquí va mi humilde resumen pidiendo disculpas por mi atrevimiento porque, con seguridad, no hace toda la  justicia que se merece,  pero que lo escribo lleno de agradecimiento a Alfredo Martínez, por hacernos partícipes de su sabiduría y además muy orgulloso de comprobar lo que ya estábamos viendo,  que se están haciendo las cosas no bien, sino en la cúspide de la excelencia en el protocolo de la Casa de Su Majestad El Rey.

MUCHAS GRACIAS D. ALFREDO.

Gerardo Correas

Presidente de la Escuela Internacional de Protocolo